Comunión: producto de una buena Comunicación en la Comunidad

Desde el momento que nos encontramos en el vientre de nuestra madre, tuvimos una primera comunión, esta es directamente con nuestro Padre Celestial.

Salmo 139:16 ¨Mi embrión vieron tus ojos, y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas¨.

Imagínese que precioso que es en ese momento en el vientre de nuestra madre nos comunicamos con Dios y El con nosotros.

Después, al momento en que nacemos entramos a formar parte de una comunidad terrenal que empieza en el núcleo familiar y así todo el resto de nuestras vidas gira en torno a convivir con personas.

Aquí es donde se nos complica todo como seres humanos, porque no siempre las personas con las que nos toque convivir van a ser de nuestro agrado pero es aquí donde tiene que entrar un actor importante: El Amor.

Romanos 13: 8-10 ¨No deban a nadie nada, sino el amarse unos a otros. Porque el que ama a su prójimo, ha cumplido la ley. Porque esto: "No cometerás adulterio, no mataras, no hurtaras, no codiciaras," y cualquier otro mandamiento, en estas palabras se resume: "Amaras a tu prójimo como a ti mismo." El amor no hace mal al prójimo. Por tanto, el amor es el cumplimiento de la ley¨.

Como cristianos cumplir los mandamientos es sinónimo de amar a Dios (Juan 14:15) y en cada uno de nosotros debe existir el mismo tipo de amor que tiene Dios hacia nosotros: el  amor ágape, amor incondicional que busca el bien de la persona amada sin esperar nada a cambio.

Aunque es difícil decirlo debemos amar aun a nuestros enemigos; esto incluye  a las personas que nos odian, que nos maldice, que nos hieren o inclusive nos roben.

Amarlos incluye orar por ellos, hacer el bien y bendecirlos (Lucas 6:27-31). Cuando hacemos esto estamos siendo personas benignas y así conforme a lo que sembremos nosotros cosecharemos.

Imagínese que pasa si usted responde a las agresiones de las personas, lo que viene es un problema que se va haciendo más grande y difícil de solucionar interfiriendo en una buena comunión con las personas. Si somos pacientes y mostramos amor vamos a ver a nuestro peor enemigo transformado porque el amor vence todos los obstáculos.

Acordémonos de Zaqueo un hombre que robo a través del cobro alterado de impuestos y a pesar de que él era indigno Jesús fue a su casa para regalarle la salvación. También el apóstol Pablo quien antes le llamaban Saulo, se encargo de perseguir a la iglesia y encarcelar/matar personas injustamente, (pero Jesús lo perdono a pesar que atentaba contra el plan de Dios y lo perseguía,  creyó en el poniéndolo como persona de confianza para predicar su palabra.

Si Jesús que es el hijo de Dios, un príncipe, tiene misericordia de los demás, aun más nosotros debemos perdonar a las personas que nos ofenden así como Dios nos ha perdonado ya ha nosotros.

Esto viene unido con el hecho de dejar todo egoísmo e individualismo en nosotros. No busquemos solo nuestro propio beneficio ni nos creamos autosuficientes, necesitamos la ayuda de las personas que se encuentran en nuestra comunidad.

Recuerde que cada uno es bueno en un área y cuando trabajamos en equipo por un mismo objetivo vamos hacer un eslabón fuerte que no se podrá romper.

Si rechazamos a los demos o tratamos de pisotearlos lo que hacemos es sembrar la semilla del odio en ellos, seamos estrategas conquistemos a las personas porque el que menos pensamos que puede ayudarnos es el que puede darnos la mano en un momento crítico.

La parábola de buen samaritano nos deja un gran mensaje:

A un hombre lo asaltaron y lo dejaron mal herido en el camino a Jericó y pasaron tres personas al lado de él. (Lucas 10:29-37)

·         Primero un sacerdote, que solo lo vio y lo dejo tirado en el suelo.

·         Luego paso un Levita, que hizo lo mismo que el sacerdote.

·         Finalmente un Samaritano, que sintió compasión por el hombre. Le sano sus heridas, lo monto en su cabalgadura, lo llevo a un hotel y ahí cuido de él aparte de dejarle todos los gastos pagados.

ANALISIS: Esta parábola es muy interesante porque nos muestra primeramente que el único que se digno ayudar al judío fue un Samaritano. Los Samaritanos vivían en el desierto, eran rechazados y considerados los enemigos de los judíos.

Pero vemos que a pesar que no había comunión, el samaritano con una buena actitud y dejando atrás cualquier orgullo se paró a rescatar a su prójimo.

Lo que el samaritano le comunico aquí al judío a través de sus acciones fue: ¨no me importa lo pasado yo quiero ser tu hermano¨.

Si nos ponemos a pensar la comunicación no solo es con palabras, puede darse a través de acciones o gestos. Y en la parábola del buen samaritano vemos que la comunicación fue a través de una acción.

Es aquí cuando nos damos cuenta que la base de cualquier comunión radica en la COMUNICACIÓN.

Esto porque ya que todos necesitamos vivir en compañía de otras personas para tener una vida plena, por lo tanto sentirnos aceptados o sentirnos parte de una comunidad es primordial y para lograr esto, la comunicación viene a tomar un papel importante.

¡La comunicación sustenta la comunidad!

Dios nos puso compañía para que no estuviéramos como ermitaños, aislados o despreocupados por los demás.

Póngase en el papel de los enamorados, si entre estas dos personas no hay comunicación,  es decir no hablan o tienen contacto físico… ¿usted cree que van a llegar a lejos con la relación? 

Es imposible porque como la otra persona no va a saber lo que usted  realmente quiere o siente si no se lo transmite. Así como nos enseñaron a todos en la escuela para una buena comunicación tiene que haber un receptor, un emisor y un canal de distribución.

Una iglesia (que es una comunidad) es muy unida y todos sus miembros se llevan bien pero no tiene comunicación a través de la oración con Dios, ¿Cree usted que llegaran lejos?

Seguro que no porque no están recibiendo el mensaje del emisor principal, Dios.

CONCLUSION:Dentro de toda comunidad tiene que haber comunión y una buena comunicación. Primero la comunión es importante para unir a las personas sin importar las deficiencias de cada quien, viendo siempre que todos somos importantes porque somos las piezas de un gran rompecabezas, si una pieza falta la obra no se verá reflejada.

La comunión hace que nos comprometamos dentro de la comunidad, amando y respetando a los demás, dejando todo egoísmo atrás.

Segunda la comunicación es el enlace entre la comunidad y la comunión, permitiendo transmitir a todos los miembros de una comunidad un mismo objetivo y que de esta manera todos los miembros se pongan de acuerdo para alcanzarlo. 

Comunidad + Comunicación= Comunión

Al tener estos tres factores unidos podemos cosechar un eslabón fuerte inquebrantable ante cualquier circunstancia.